El alcalde de Alicante, Luis Barcala, ha autorizado mediante decreto la recuperación del servicio de la totalidad de las líneas, frecuencias y autobuses del transporte público urbano colectivo para la época estival desde este mismo lunes. Aun así se mantendrá la obligatoriedad del uso de la mascarilla y del pago sin efectivo a través de bonos de transporte o tarjetas sin contacto.
El concejal de Transportes, Manuel Villar, explicó que, «con el fin del estado de Alarma volvemos recuperar la totalidad de autobuses, líneas y frecuencias del servicio de transportes urbano de la ciudad de Alicante, con las medidas de protección dictadas por las autoridades sanitarias y el Gobierno central y autonómico como es la obligatoriedad del uso de la mascarilla y la distancia de seguridad». En el autobús urbano se podrán ocupar todas sus plazas y la capacidad para las personas que viaje de pie se establece en dos por metro cuadrado.
Así, poco a poco las ciudades empiezan a recobrar la normalidad que les caracterizaba. Es cierto que el coronavirus ha originado una crisis social y también económica, por eso muchos empresarios de la costa alicantina han visto mermados sus ingresos. Para hacer frente al pago de sus facturas, muchos han tenido que recurrir a descuento de pagarés urgente para así conseguir liquidez de forma rápida e inmediata.